
Fobia a los fuegos artificiales
Previsibilidad
A diferencia de las tormentas eléctricas, los fuegos artificiales se activan intencionalmente. Puede optar por no ir tan lejos como para comprar fuegos artificiales y hacer que un asistente los haga detonar en un lugar legal mientras entrena a su perro, pero podría hacerlo si quisiera.
Puede entrenar a su perro cuando sabe que otras personas dispararán fuegos artificiales, y puede configurar su lugar de entrenamiento a una distancia de la ubicación de los fuegos artificiales. Esta previsibilidad es una poderosa ventaja en el entrenamiento.
Formación
Al igual que al tratar con otras cosas que asustan a algunos perros, lo mejor es trabajar con su perro antes de que vea signos de miedo.
Idealmente, configure con su perro a una distancia de los fuegos artificiales para que el ruido no sea fuerte, pero el perro puede ver que una persona está causando el ruido. Esta conexión ayuda a muchos perros al quitarle el misterio.
Las golosinas funcionan con perros codiciosos, y los juegos que aman a su perro pueden ser aún más poderosos para ayudar al perro a desconectarse mentalmente del ruido. Cuando un perro actúa un comportamiento instintivo que se ha construido a través del entrenamiento y la experiencia, la mente y el cuerpo están inmunizados contra el miedo y el dolor.
Prevención
No deje a un perro afuera solo cuando alguien vaya a usar fuegos artificiales.
Además del riesgo de que se cree un miedo en el perro, muchos perros huirán de un patio vallado en pánico y se perderán. Si no puede tener una sesión de entrenamiento de enfoque completo, mantenga sus interacciones con su perro optimista, feliz y abundante.
No use una voz compasiva o un toque que le dé al perro un motivo para tener miedo. Actúa feliz y seguro, y recompence a su perro por un comportamiento seguro. Las infecciones de oído pueden hacer que los ruidos sean más dolorosos.
Cuide bien las orejas de su perro.
Preste especial atención si las orejas no están erectas o si el perro alguna vez ha tenido una infección en el oído. Los perros tienden a ocultar su dolor como un instinto de supervivencia, por lo que es importante hacer un esfuerzo real para conocer la condición física de su perro.
Los miedos a menudo son contagiosos de un perro a otro, así como de personas a perros. Si tiene un perro que teme los fuegos artificiales y obtiene otro perro, trabajar con el temeroso puede ayudar a evitar que el nuevo perro desarrolle el mismo miedo.