Dolor abdominal en perros

Dolor abdominal en perros

Peritonitis en perros
 

La peritonitis a menudo se asocia con dolor abdominal agudo debido a la inflamación repentina de los tejidos abdominales, o peritoneo, de ahí el nombre para la condición. Esto hace que el fluido se desplace hacia la cavidad peritoneal, lo que provoca deshidratación severa y desequilibrio electrolítico. La peritonitis puede deberse a causas infecciosas como la gripe estomacal o causas no infecciosas como una hernia.

 

Mientras que los perros más jóvenes tienden a tener un abdomen agudo debido a causas infecciosas y traumáticas, los cánceres malignos son más a menudo la causa del abdomen agudo en perros mayores. Es crucial determinar la causa subyacente del abdomen agudo ya que su veterinario puede tener que realizar una cirugía de emergencia para resolverlo.

 

Síntomas y tipos
 

-Letargo
-Temblor
-Llorando, Gimiendo
-Postura anormal (es decir, puede estar "protegiendo" el estómago al acurrucarse, o inclinado hacia adelante con el extremo posterior más alto en un intento de aliviar el dolor)
-Respiración fuerte
-Abdomen hinchado (puede ser rígido al tacto
-Diarrea, que puede ser negra (también conocida como melena)
-Puede tener vómitos si el estómago o los intestinos están involucrados
 

Causas
 

Causas infecciosas

-Agujeros en el revestimiento del estómago del perro
-Virus del estómago o del tracto intestinal
-Virus de la peritonitis infecciosa felina
-Enteritis viral (gripe estomacal)
-Parásitos del estómago o intestinos
-Infección bacteriana del útero
-Abscesos del hígado, bazo y / o páncreas
 

Causas no infecciosas

-Tumores
-Cánceres
-Envenenamiento
-Defectos congénitos
-Trauma en el abdomen, posiblemente con ruptura de órganos (hernia)
-Ruptura de los uréteres (tubos que transportan la orina), vejiga o útero -embarazado
-Hernia congénita que causa el atrapamiento de órganos
-Obstrucción de la uretra o los uréteres
-Obstrucción de riñón o vesícula biliar (por ejemplo, depósitos de cálculos)
-Dilatación gástrica y vólvulo
 

Diagnóstico
 

Su veterinario necesitará un historial médico completo para comenzar a identificar qué está causando el abdomen agudo. La historia que proporcione puede brindarle a su veterinario pistas sobre qué órganos están causando el dolor abdominal repentino. Él o ella también realizará un examen físico completo para ver si el dolor realmente está en el abdomen y no en los riñones o la espalda. Si su perro tiene un abdomen hinchado, su veterinario usará una aguja fina para extraer parte del líquido del abdomen y enviarlo al laboratorio para su análisis.

 

Se realizará un perfil sanguíneo completo, que incluirá un perfil de sangre química, un hemograma completo, un panel de electrolitos y un análisis de orina. Su veterinario también puede usar una jeringa para tomar la orina de su perro y enviarla a un laboratorio para su examen.

 

Su veterinario necesitará usar diagnósticos visuales para examinar el abdomen internamente. Se usarán rayos X y ultrasonido para localizar la fuente de la alteración en el abdomen. Si su perro es joven (aún es un cachorro) también se le puede dar un análisis de sangre del parvovirus.

 

 

Tratamiento
 

El curso del tratamiento dependerá del diagnóstico. Sin embargo, la cirugía a menudo es necesaria. Generalmente, se requiere terapia con líquidos intravenosos, ya que los animales con abdomen agudo suelen estar deshidratados, y esto puede convertirse rápidamente en una afección potencialmente mortal. También se pueden recetar medicamentos para el dolor, para aliviar a su perro.

 

Los medicamentos pueden usarse para disminuir los ácidos del estómago y cubrir el estómago, dependiendo de la causa de la enfermedad. Del mismo modo, si la enfermedad así lo indica, su perro puede recibir medicamentos para detener el vómito y los antibióticos para inhibir la infección bacteriana.

 

Vivir y administrar
 

El abdomen agudo generalmente es un indicador de una enfermedad grave que requiere cuidados intensivos bajo la supervisión de un veterinario. Varios días de cuidado son típicos; en algunos casos, un animal puede tener que permanecer en la UCI (unidad de cuidados intensivos) por períodos prolongados.

 

Después de llevar a su perro a casa, administre todos los medicamentos recetados exactamente como lo indica su veterinario, durante todo el tiempo que se le haya prescrito, incluso después de que hayan pasado los síntomas y de que su perro parece haberse recuperado por completo. Observe a su perro de cerca por si hubiera algún cambio. Si observa hinchazón, pus o si tiene preguntas, llame a su médico de inmediato, ya que esto puede convertirse rápidamente en una afección potencialmente mortal.

 

Las citas de seguimiento con su veterinario son esenciales para asegurar que la condición de su perro esté mejorando.