
¿Cuáles son los tratamientos para la neumonía en perros?
Visión de conjunto
Si tu perro está tosiendo, tiene fiebre, no está interesado en comer o actúa apático, podría tener una infección pulmonar, también conocida como neumonía. Aunque las bacterias son la causa más común, los virus, hongos, parásitos e incluso las alergias pueden causar esta enfermedad potencialmente grave. La neumonía puede demorarse por semanas, pero en general no es potencialmente mortal. La mayoría de los perros se pueden tratar en casa.
Condición estable
Si el apetito y el nivel de actividad de su perro son normales, puede
brindar atención para la neumonía en el hogar. Mantenga a su perro adentro
tanto como sea posible para evitar exponerlo al clima húmedo o al frío
extremo, lo que puede empeorar su condición. La recuperación depende en
parte de asegurarse de que la materia infectada se escuche, por lo que es
importante aflojar el moco y el pus en los pulmones. Coloque a su perro en
una habitación con un vaporizador dos veces al día durante intervalos de
diez a quince minutos para mantener sus secreciones de las vías
respiratorias superiores húmedas.
También puede usar un nebulizador que permite que pequeñas gotitas de
niebla entren en los pulmones y humedezca las secreciones en las vías
respiratorias inferiores. Mantenga a su perro en el baño por un período
corto después de realizar una ducha caliente para crear vapor. El ejercicio
diario ligero, como caminar, y una técnica de terapia física llamada
coupage ayudarán a aflojar las secreciones, incluidas las profundas en los
pulmones. Coupage consiste en darle a la pared del pecho de su perro
golpecitos rápidos y suaves, que estimulan la tos. Realice esta técnica
cuatro veces al día.
Siga las instrucciones de su veterinario para administrar antibióticos si
su perro tiene una infección bacteriana. Los antibióticos pueden ser
necesarios por varias semanas. Evite administrar supresores de la tos a su
perro, lo que puede dificultar la recuperación. Lleve a su perro al
veterinario para volver a verificar las radiografías una vez a la semana
para asegurarse de que el proceso de recuperación vaya bien.
Condición inestable
Si su perro experimenta letargo o pérdida del apetito, el tratamiento de la
neumonía requerirá hospitalización. El hospital mantendrá los niveles de
fluidos de su perro estables mediante el uso de la fluidoterapia
intravenosa. Esto estimulará la tos y evitará la deshidratación.
Puede ser necesario un lavado traqueal, que consiste en tomar una muestra
de líquido de los pulmones de su perro, para determinar qué antibióticos
serán más efectivos para matar a las bacterias responsables de causar la
neumonía. Una combinación de antibióticos podría usarse para tratar la
condición de su perro. Las inyecciones de antibióticos aseguran que los
medicamentos se absorban completamente en el cuerpo.
También se puede usar un nebulizador que contenga antibióticos para
proporcionar humedad adicional y medicamentos que penetren en los pulmones.
Un terapeuta realizará un parche cuatro veces al día para promover la tos.
Su perro podría ser liberado del hospital una vez que recupere su apetito.
Su perro debe continuar la terapia antibiótica y física en el hogar hasta
que se recupere por completo. También se requerirán radiografías de
re-chequeo semanales.
Condición crítica
Si su perro no está recibiendo suficiente oxígeno, la neumonía tendrá que ser tratada con oxigenoterapia. En algunos casos, la atención las 24 horas también podría ser necesaria. Su perro puede estar equipado con una campana de suministro de oxígeno o colocado en una jaula de oxígeno que suministra 40% de oxígeno. La neumonía rara vez requiere cuidados críticos, y la mayoría de los perros que reciben este tipo de tratamiento pueden recuperarse.